"REZANDO ENTRE BANDOS". Jara Roche

José Civera Mur
Nacido en Lérida, un 23 de julio de 1911
Muere en La Pobla de Segur en 1996


Todos en la guerra acabamos perjudicados de una manera u otra unos pocos afortunados vivieron alejados de ella, sin embargo ese no fue mi caso.

Nunca lograré a entender por qué llegué hasta esa situación yo era un simple panadero.

Me consideraba una persona normal con un trabajo humilde y una vida común, hasta demasiado simplona diría yo,me crié en un pequeño pueblo de los Pirineos catalanes y llevaba muy arraigada la influencia católica que había heredado como legado familiar.

Me gustaría maldecir el día en que me uní la Federación de Jóvenes Cristianos de Cataluña pero aún hoy en día me siento orgulloso de ella y de lo que representaba para mí. Considero que después de todo, cualquiera debería expresarse como quisiera sin que se tuvieran en cuenta los ideales de nadie.  Odio y que dios me perdone a la gente que no respeta los ideales del resto y que pretenden imponer los suyos ante todo.

Si todos se respetaran mutuamente yo no me encontraría aquí rodeado de una panda de borrachos republicanos que luchan que matan a sus hermanos y hermanas sólo por tener otra ideología distinta de la suya.

Recuerdo cómo empezó todo,al estallar esa estúpida guerra sin sentido, empezaron los registros en busca de armas,No les gustó encontrar mi cartilla de afiliación a la Federación de los  Jóvenes Cristianos de Cataluña en mi casa y aunque yo no fuera un enemigo ni presentara ninguna amenaza para ellos, decidieron arrestarme.

Los integrantes del movimiento antifascista me llevaron a Lérida y estuve pudriéndome en la cárcel durante varios meses a la espera del juicio del tribunal popular,del cual no recibí buenas noticias, me acusaron de ser fascista y acuñaron que tenían pruebas lo que significaban dos años más de cárcel y me llevaron a Barcelona para cumplir condena, nada más llegar me prometieron la libertad siempre y cuando pasara a ser un prófugo,un huido de la justicia y me entregara a unos militares para que me reclutaran, yo sabía muy bien que ellos preferían que los encarcelados fuéramos a la guerra a que estuviéramos en la cárcel donde no les aportábamos nada, me ví obligado a unirme al ejército rojo en contra de mi voluntad para luchar contra el ejército nacionalista únicamente para salvar mi vida.

Me enviaron a luchar al frente aragonés después de mi reclutamiento en Montjuic y más tarde al frente de Huesca tomando pueblos, decidí escaparme a Francia con unos compañeros con la esperanza de huir de todas esas atrocidades,p ero nunca llegamos a nuestro destino ya que la policía francesa no quiso que pasáramos y nos devolvió a España en un tren del cual no sabíamos su rumbo ni a donde nos llevaría si al bando del ejército rojo o al nacionalista, lo único que me pasaba por la mente era la idea de que me condenarían a muerte de cualquier manera, ya que si me entregaban al ejército nacionalista yo había estado combatiendo con el enemigo y si por el contrario me entregaban al ejército rojo era un desertor.

Caí en manos del bando nacionalista donde fui juzgado y condenado a muerte después me enviaron a un campo de concentración en Burgos y doy gracias a Dios que los vecinos de mi pueblo consiguieron toda mi documentación necesaria para demostrar que yo era católico y que pertenecía a un grupo que había tenido que combatir en el ejército rojo en contra de su voluntad y me dejaron en libertad con la condición de que debía combatir con el ejército nacionalista y me envíaron a mi tierra natal al frente de Lérida con tan mala suerte de ser apresado tras una batalla por el ejército rojo.

Fui condenado a muerte otra vez aunque nunca llegué a cumplir condena debido a la victoria del ejército nacionalista,

No he llegado a superar todas las secuelas que dejó la guerra en mí pero al menos, terminó.

Haciendo este trabajo de investigación me he dado cuenta de la dificultad de los historiadores a la hora de hacer su trabajo, intenté contar una historia familiar pero mi abuela no tenia ninguna historia relacionada con la guerra ni nada parecido, mi tia como solución le pidió a un compañero suyo de trabajo que me contara la historia de su abuelo y me pasó un pdf pero yo preferí ir a visitarle para enterarme mejor de la historia.

Jara Roche 4ºB